Capítulo 9

Me desperté con los primeros rayos de la mañana, que es lo que me pasa siempre que no cierro las persianas de forma drástica, no puedo dormir con luz, tengo el sueño liguero, y si a eso le unes que me meaba de una forma horrible.

Decidí levantarme, aunque no quería despertar a Danny, no eran más de las 6 de la mañana, aunque era difícil, porque estaba abrazado a mí. Me fui deslizando lentamente hasta que, como no, me caí al suelo. Me levante rápidamente y mire a ver si se había despertado con el golpe. Pero nada, seguía durmiendo sin inmutarse. Menos mal.

Me puse de puntillas y fui en silencio al baño. Hice lo que tenía que hacer y volví a la cama, me metí y me coloqué en la misma posición que estaba antes. Ha decir verdad me sentía muy segura entre sus brazos, tanto que no quería irme a ningún lado en ese momento. Bueno también me moría de sueño, no sabía a qué hora había llegado allí, pero yo estaba agotada.

No conseguía moverle el brazo para poder meterme debajo y note como los movía él.

• Pensaba que te ibas a ir y dejarme una nota en la almohada.
• 
  
• Todavía no, es muy temprano, los taxis todavía no se han levantado.
• No puedo contigo, cada minuto me sorprendes más. Y yo que pensaba que cuando te levantaras te asustarías y te irías corriendo.
• Huy no, no eres tan feo, además como se entere Mery que vuelvo a pasar la noche contigo y además en tu casa, sin hablar contigo me mata, y te aseguro que me da más miedo ella que tú. Con sus ídolos no se juega.
• Vaya, sí que tienes aprecio por ella.
• Es como una hermana para mí. Gracias a ella se quién eres. Porque me dijo que viera un video vuestro.
• ¿Qué video?
• Pues uno del concierto del Rock In Rio de Madrid. Es que nosotras estuvimos en ese concierto.
• ¿Así que ya has estado en un concierto nuestro?
• Si, aunque fue de casualidad, mira que no sabía quién eras. Te voy a ser sincera, a mí me encanto el chico rubio que toca el bajo. Es tan guapo.
• ¿Dougie?
• Puede ser, si creo que Dougie. ¿Cómo se llaman los otros?
• Tom y Harry.

Me quede callada.

• No tienes ni idea quien es cada uno verdad.
• Pues no, pero supongo que tendré que informarme, total tengo un concierto al que ir.
• Y por curiosidad, a quien ibas a ver al Rock in Rio sino fuiste a vernos a nosotros?
• De verdad quieres saberlo?
• Me muero de ganas.
• Pero no te rías de mí.
• No puedo prometerte nada.
• Vale, fui a ver a Miley Cyrus.
• HA HANNAH MONTANA, de verdad, en vez de vernos a nosotros?
• Primero, Hannah Montana ha muerto, es decir fui a ver a Miley, es distinta. Las puedes distinguir porque una va desnuda y la otra viste hortera. Y segundo, no os seguía, vamos os conocía, vamos sabía que existía un grupo que se llamaba McFly, había escuchado una canción y no me convenció mucho.
• Me acabas de matar.
• Huy que mala soy, que no era broma, os fui a ver, en una canción me miraste a los ojos durante 2 segundos y sentí que eras el hombre de mi vida. A partir de ahí comencé a escuchar tu música sin parar y decidí inventar un plan para conocerte, haciéndome pasar por una joven indefensa que no te conocía de nada para que tu calleras en mis redes y ya no pudieras dejarme nunca. Y parece que el plan ha funcionado.
• VETE DE MI CAMA Y DE MI CASA MALDITA TRAIDORA…

Con el grito que pegó me asuste tanto que me levanté y le miré a la cara, intentando descubrir si lo había dicho enserio. Pero nada más mirarme se empezó a reír y yo reaccione dándole un puñetazo en la tripa y volviéndome a tumbar encima de él.

• Joder, me has dado un susto de muerte.
• Era lo que merecías por inventarte cosas así y por preferir a Hannah Montana a mí y además menospreciar mi música y haberte fijado en Dougie.
• ¿Pero quien me ha llevado al huerto? Yo me quedaría con eso.
• No puedo – decía mientras se reía – de verdad que no puedo contigo, me dejas a mi sin contestaciones, eres demasiado buena.
• Gracias, todo lo aprendí de mi padre, es un tío muy gracioso.
• Pues se tiene que sentir muy orgulloso.
• Seguramente, ya te lo presentaré un día de estos.
• ¿COMO? – Dijo con un tono de preocupación.
• Tranquilo, tranquilo, era una broma. Esto por el susto de antes.
• Con esas cosas no juegues.
• Ojo por ojo y diente por diente señor Jones – dije bostezando.
• ¿Tienes sueño?
• Que va… como puedes pensar eso.
• ¿Quieres dormir un poco más?
• Aja, mmm si porfi. Aunque debería ir a la universidad. Me despiertas a las 8?
• ¿Y si te quedas aquí conmigo y no vas al a universidad?
• Bueno, podría hacerlo, pero no se… el deber es el deber…

Cogió y no sé muy bien cómo, me beso suave y lentamente.

• Crees que con un beso me vas a convencer?

Y lo volvió a hacer, muy lentamente.

• No sé yo, a ver prueba otra vez.

Y volvió al lio, pero no pudo aguantar porque comenzó a reír.

• Y si además te preparo waffles para desayunar?
• Muy bien, despiértame cuando estén hechos.

Me levante, le di un pico y me volví a tumbar en su pecho.

• Eres incorregible – decía mientras se colocaba y se reía.