viernes, 11 de marzo de 2011

Capítulo 14 - Parte 3

Mientras en el escenario, los chicos preparados empezaron a tocar.

  • Buenas noches, esto es Shine a light.

http://www.youtube.com/watch?v=TcPIzqn0QC0&feature=related

Tenía una visión completa de todos y no pude parar de reírme en toda la actuación, Mery junto con Dougie y Harry habían inventado un baile, en plan mímica y estaban levantados bailando y cantando a grito pelado. Eran un cuadro, pero lo hacían muy bien. No podía parar de reírme.

En ese momento pasaba por allí Joe que me miro algo extrañado porque no entendía porque no podía parar de reírme. Señale a donde estaban los tres bailando y Joe también empezó a reír.

  • ¿Cómo es que no estas allí con ellos haciendo el tonto? Si a ti te encantan esas cosas.
  • Me apetecía estar sola y pensar.
  • ¿Una noche dura?
  • Horrible. Pero espérate que todavía no ha terminado, de todo puede pasar.
  • ¿Todo bien con Danny? ¿Se estará comportando?
  • Sí, es un encanto. Está un poco loco.
  • Ni que estuvieras muy cuerda.
  • También es verdad.

Nos reímos y nos dimos un abrazo.
  • Lo has hecho muy bien esta noche. Además el bar está lleno.
  • Creo que eso se lo tienes que agradecer a Danny y a los chicos.
  • Bueno, pero si no fuera por ti, no estarían esta noche aquí.

Yo le sonreí y le abrace fuerte.
  • Te dejo sola para que pienses. Aunque yo que tu estaría contenta y orgullosa.
  • Gracias Joe.
  • A ti pequeña.

Y se fue guiñándome el ojo.

Cuando terminaron con Shine a Light y cuando consiguieron que todo el mundo se callara, tras dar las gracias como unas mil veces empezaron a tocar otra canción, sin decir nada. No había escuchado esa canción en mi vida, pero parecía que era la única, porque los demás estaban totalmente entregados.

http://www.youtube.com/watch?v=5VVeIZp_C9E&feature=related

La canción era la cosa más bonita que había escuchado nunca, la voz de Danny me mataba, no podía cantar tan bien. Me gustó tanto que me emocione y un par de lágrimas se me escaparon. Lo que me faltaba ya, llorar también. Noche completita.

Pensaba que todo iba a terminar aquí, pero lo que cantaron después sí que hizo que mi corazón se parara durante unos segundos y volviera a latir, si, hablando claro, morí por la canción y volví a revivir, sea dicho que también por la canción.

  • Muchas gracias, ahora vamos a tocar una canción muy antigua, pero que fue compuesta aquí y que comparte nombre con este bar. Va por ti Kate.


Así fue como morí la primera vez, aunque no fue la única. Danny me miro y me guiño el ojo, Mery se dio la vuelta y me sonrió. Tom se quitó la guitarra y se sentó al lado de Harry. ¿Por qué se iba Tom del escenario? No podía articular palabra y menos movimiento.

http://www.youtube.com/watch?v=Q1wiItHvQkQ&feature=related

No podía creer que la estuviera tocando. Era la canción perfecta. No sé en qué momento de la canción, pero empecé a llorar, pero a llorar mucho. Tampoco recuerdo cuando vino Mery a mi lado, solo recuerdo a las dos, abrazadas encima de la barra, escuchando la canción y llorando. No puedo recordar si Mery lloraba o no, pero yo si lo hacía.

Nada más terminar de cantarla y como cierre a la canción cantó un trozo de la canción de If U C Kate, no estaba entera, pero ahí volví a morir. No entendía como podía provocar su voz en mi esa sensación de abismo, de estar a punto de caer en picado, un gran nudo en el estómago.

http://www.youtube.com/watch?v=otH9SqyPuyE&feature=related

No sabía porque, pero no podía parar de llorar, y tampoco sabía muy bien porque lloraba. Porque además lloraba y sonreía.

  • Tu cada día estas peor, ¿te das cuenta que estas llorando y sonriendo a la vez?
  • Yaaahh! - dije llorando.

Y nos empezamos a reír. Mery se bajó de la barra, cogió un vaso de agua y me lo dio.

  • Venga tranquila, tienes que ir a agradecerles la actuación e invitarles a una copa. Así que corre, vete al baño, y cuando estés más perfecta que ahora sales con una gran sonrisa. Les das un abrazo a todos por las molestias y fin.
  • Vale jefa.
  • Así me gusta, que hagas lo que te digo.
  • Zorra manipuladora.
  • Yo también te quiero. Así que corre, vete.

Y se alejó dónde estaban los demás, esta niña es la hostia. Pero tenía razón, así que me fui al baño, me mire en el espejo y dije, oh que cara.

No podía salir así a ningún lado, parecía que hubiera llorado un océano, salí corriendo a buscar mi bolso para poder retocarme. Cuando llegue a la puerta estaba Danny sentado en mi lugar favorito del bar, o incluso el favorito del mundo en algunos momentos. Estaba con los ojos cerrados, transmitía tranquilidad, estaba guapísimo.

Me acerque poco a poco, no quería asustarle. Me senté entre sus piernas y le abrace. Danny abrió un ojo y sonrió, pero no dijo nada, solo siguió abrazándome. Estuvimos así un buen rato, menos de lo que me hubiera gustado, pienso que podría haber sobrevivido así durante meses, sin necesidad de moverme.

  • ¿Ya estas mejor? Te he visto llorar mucho.
  • Si, puede que me haya emocionado un poco.
  • ¿Un poco?
  • Bueno o mucho.
  • ¿Entonces te ha gustado?
  • Gustarme, gustarme, yo diría que me ha encantado. Habéis estado geniales, vamos sois geniales.
  • Eso ya lo sabía.
  • Eres un creído.
  • Eso también lo sabía.
  • Me alegra que seas consciente de tus limitaciones, ¿que haces aquí?
  • Abrazarte creo.
  • ¿Y antes de que yo llegara?
  • Tocar aquí me ha recordado muchas cosas y más tocando Not Alone.
  • Me encanta esa canción.
  • Ya me he dado cuenta.
  • No la tocareis en la nueva gira, ¿verdad?
  • No sé, estamos montándolo todavía.
  • Pues no la toquéis.
  • Eres muy rara, pero si te encanta la canción. ¿No deberías decirme que la tocara?
  • ¿¡Has visto como me he puesto esta noche?!
  • Claro que lo he visto, me has preocupado un poco, hasta que ha llegado María a tu lado. ¿Entonces no quieres que vuelva a tocar esa canción en tu presencia?
  • Bueno... puede que nunca sea exagerar, mejor borramos esta conversación y ya vosotros decidís que tocáis y donde.
  • El no contesto nada, solo se reía. Apoyó su barbilla en mi cabeza.
  • ¿Y tú a que venias aquí?
  • A por mi bolso, que de tanto llorar se me ha quedado una cara horrible.
  • A ver - dijo mientras me levantaba el mentón- pues si chica, parece que llevaras 2 días llorando, dios no es tu mejor día.

Que cabrón, pensé. Sabía que en parte era de coña, pero realmente estaba horrible. Así que decidí hacerme la herida y sensible para devolvérsela.

  • Dios estoy horrible, no me mires - volví la cara y la junte contra su pecho, pobre camiseta blanca pensé. Y comencé a hacer que lloraba.
  • Joder, sí que estás sensible hoy.
  • Noooo, es que has sido muy cruel. Diossss!
  • Vamos tonta, no te pongas así, si sabes que era para picarte.
  • Noooo, realmente tú piensas eso.
  • De verdad que no.
  • Entonces qué piensas - dije haciendo pucheros y sin separarme de su pecho.
  • Que eres preciosa. Maquillada, sin maquillar, vestida, desnuda, sobretodo desnuda... Vamos que me encantas.
  • ¿¿Te encanto??
  • Así es. Me encantas.
  • Bueno es normal, soy una belleza.

Y me empecé a reír. Me di la vuelta y le mire. En seguida cambio su cara de preocupación a otra de… te voy a matar.

  • Te mato, no sabes lo mal que me sentía.
  • Te lo merecías, por decirme esas cosas.
  • Pero si sabias que estaba bromeando.
  • Yayayayaya.

Nos reímos juntos, sin dejar de mirarnos. Nos fuimos acercando más y más hasta que me besó. Un beso corto y dulce. Se separó de mí y se quedó mirándome unos segundos, me acaricio la cara y volvió a besarme.

En ese momento llego Tom, carraspeo y nosotros le miramos durante unos segundos y nuestras miradas volvieron a encontrarse.

  • Siento interrumpir, creía que estabas solo y como no salías me estaba preocupando.
  • No te preocupes estoy bien.
  • Ya veo. Bueno pues os dejo.
  • No, espera Tom, yo tengo que ir al baño y salir a invitaros a tomar algo.

Hice fuerza para levantarme, pero Danny me sujeto.
  • ¿Te vas a levantar sin ni siquiera despedirte?
  • Ni que no te fuera a ver dentro de 2 min.
  • Pero ahí fuera no podré hacer esto.

Me cogió por la barbilla y por la cintura, me dio un beso de despedida, pero vamos después de una despedida así era complicado separarse de él.
  • Ya dejo que te vayas - dijo cuando terminó.
  • Ahora la que no se quiere ir soy yo. - y le besé.
  • Ya está - dije cuando me forcé por terminar, aunque no tenía muchas ganas de irme.

Me levanté cogí el bolso y me fui hacia la puerta. Tom seguía en la puerta y no sé muy bien porque, pero fui y le abrace.

  • Muchas gracias por tocar esta noche, habéis estado geniales, y me habéis salvado. Gracias - y le di un beso en la mejilla.
  • No tienes que agradecerme nada, dáselas a Danny, no me dió opción.
  • Creo que ya se lo he agradecido por hoy.
  • Bueno, veamos, si contamos que me debías una por la noche que te salve del borracho, la que te invité a ese maravilloso local de moda, lo de hoy... Y contando lo de la noche que nos conocimos, que no cuenta, solo queda lo del almacén... No sé a ti, pero lo que es a mí, no me salen las cuentas.
  • Vamos a ver majo, primero ¿qué es eso de hacer una lista con las que te debo? Así no empieza bien la historia. Y segundo, puedes hacer el favor de no analizar delante de tus amigos las veces que nos hemos acostado si yo estoy delante.
  • Así que si tu no estas puedo comentarlo con los chicos.
  • ¿Cambiaría algo que te dijera que no lo hicieras? Como si no lo fueras a hacer. Además quién te dice que yo me lo voy a guardar en secreto. Estoy segura que Mery se muere por saber la historia del almacén.

Le guiñe un ojo y salí de la sala. Llegué al baño, me retoqué y volví al bar, un poco más animada, al fin había terminado la noche de trabajo, al menos en parte.

Ya podía relajarme y disfrutar un poco de la noche, teniendo en cuenta que hacia menos de dos horas que había echado un polvo en el almacén, puede que la noche no había sido tan mala como me parecía.

Llegue a la barra y desde ahí llame a Mery y los demás para que se acercaran. Cuando llegaron todos, bueno menos Danny, que no tenía ni idea donde se había metido...

  • Bueno, quería decir unas palabras, sabéis si va a tardar mucho Danny en salir de donde quiera estar?

Se encogieron de hombros, menos Tom, que señalo hacia el fondo del bar, donde Danny hablaba con unas chicas. Cosa que si me pico un poco más de lo normal.
  • Bueno, pues como parece ocupado, empiezo sin él.
  • Por fin, ese brillo en tus ojos, menos mal. - dijo Mery gritando.
  • ¿Qué coño estas diciendo? - dije muy tensa porque sabía a qué se refería, esta niña tiene el don de leer mi mente.
  • Nada, que tienes el brillo de invitarnos a una copa para celebrar la alucinante actuación de McFly en este nuestro bar. ¿A que si?

Todos rieron y Mery se puso un poco roja, aunque no le duro mucho, teniendo en cuenta todas las tonterías que había hecho esa noche.
  • Pues sí, Mery das asco cuando haces eso, pero bueno quería agradeceros a los cuatro lo de esta noche, ha estado genial. Así que invito a una ronda para celebrarlo.
  • Genial - grito Dougie. Esto es jodidamente bueno, yo me siento a escuchar tocar a estos dos, hago el tonto y al final me invitan a cerveza. Esto de estar en el grupo cada día está mejor.
  • Brindo por ello. - dijo Harry.

Y todos reímos. Me puse a servir, todo el mundo quería cerveza. Cuando le pregunté a Amy me dijo que no quería nada, que se iba a casa, era muy tarde para ser miércoles. Ya ves pensé, mañana iba a flipar. Me despedí de ella con un gran abrazo, la pregunté que si le había gustado la noche y me dijo que no tenía palabras, que había estado genial. Así que nos despedimos hasta la mañana siguiente, aunque no tenía muy claro si iba a poder levantarme.

Amy dió besos a todos y se fue. Cuando se fue me serví una cerveza y salí de la barra. Me abrace a Mery y la di un beso en la mejilla.

  • Ahora quiero hacer un brindis - dije sin soltar a Mery.
  • Por mí, perfecto, llego a tiempo - dijo Danny - ¿oye y mi cerveza?
  • ¿Pues ves esa cosa que está en la barra? ¿esa que hecha cerveza si le das? Pues entra y ponte una.
  • Joe no me deja entrar, luego dice que me cargo las cosas.
  • Joe - grite- ¿te importa que Danny entre a servirse una cerveza?
  • Bueno… ¿te haces tú responsable de lo que pueda liar?
  • Sí, yo respondo por él. Ala solucionado, corre ponte una cerveza. Y ya puedes no romper nada si quieres que se repita lo del almacén.
  • Ohhhhh!! Dios Danny... - grito Dougie.

Harry se levantó y me abrazo.

  • Así me gusta, déjale las cosas claras a este cantamañanas.
  • Vamos Danny que quiero brindar. - le implore.
  • Es que no se hacerlo - dijo poniendo morritos.
  • ¿En serio? Pues vaya rockero de palo. ¿Y si no quiero servirte?
  • Por favor...

Y me sonrió, aunque mirándome con esos ojos habría sido suficiente.
  • Mira que eres inútil, anda aparta.

Me metí detrás de la barra, cogí una jarra y fui hacia el grifo. Danny se acercó por detrás y me abrazo poniendo sus manos en mi cintura.
  • Muchas gracias. - dijo en mi oído y empezó a mover su mano por mi muslo.
  • Ten cuidado con lo que haces con tus manos.
  • Pero si Amy ya se ha ido, y esos cuatro lo saben todo.
  • Mira a tus 11. ¿Ves a esas chicas?
  • Si, son unas fans, he estado hablando antes con ellas.
  • Pues no dejan de observarte.
  • Ya veo. Y no te gusta que me miren.
  • No es eso, es que esa son las que luego empiezan los rumores en internet.
  • ¿Te estas escuchando? ¿Entonces qué piensas hacer el viernes? No te puedo llevar a cenar a ningún lado, porque en cualquier lado puede haber alguien que me conozca.
  • ¿A es que no vamos a cenar en tu casa?
  • ¿No hablaras enserio verdad? - dijo cogiéndome del brazo y poniéndome uno frente al otro.
  • Claro que sabía que no íbamos a quedarnos en tu casa a cenar, pero entiéndeme tú ahora, te están mirando Danny.
  • Pero es que esto puede pasar en cualquier momento, yo no quiero esconderme, si me apetece besarte, pues quiero poder hacerlo. Me gustas Raquel, lo entiendes, no sé si tanto como para casarme o tener una relación seria, pero si para besarte ahora mismo si me apetece.
  • Danny sabes que a mí también me gustas.
  • Puede ser, pero ahora mismo te preocupa más que piensen ellas de ti que lo que pienso yo.
  • No es verdad, estas sacando las cosas de contexto.
  • ¿A si? Pues bésame.
  • No me pidas eso por favor.
  • Ya me parecía.

Cogió y salió de la barra tirando una banqueta al suelo. Yo me enfade tanto conmigo misma que cogí la cerveza que le había servido a Danny y la tire contra el suelo. Lo que hizo que todos me miraran.

Joe también miro, parecía sorprendido de que fuera yo la que había liado toda aquella. Le pedí perdón y me puse a recogerlo. Mientras recogía Mery se acercó a echarme una mano.

  • María soy gilipollas.
  • Lo que no entiendo es porque te quedas aquí en vez de ir a buscarle y explicarle todo.
  • Porque mira la que he liado, como me vaya sin limpiarlo Joe me mata.
  • Y para que estoy yo aquí, sino es para salvaste la vida, así que corre.
  • Pero no sé que decirle.
  • Dile lo que sientes, si le gustas de verdad tendrá que entenderlo, aunque tú también tienes que ceder un poco. Recuerda que para que las cosas funcionen tenéis que ceder un poco los dos.

La abracé, la di un beso y salí de la barra. Imaginaba donde estaba, así que me fui para ya. Cuando llegue estaba tirado en el sofá con los cascos puestos. Realmente estaba con mis cascos puestos aunque vi que era su iPhone lo que estaba escuchando, ¿porque llevaba los cascos en el bolso si el iPod estaba en casa?

Pero bueno eso no era lo importante. Me acerque hasta él, le toque la pierna para que me hiciera un hueco. Me miró, se le notaba enfadado, flexionó sus piernas y me senté a su lado.

Se quitó los cascos y dijo.

  • Siento haberlos cogido sin permiso, necesitaba escuchar algo de música.
  • No te preocupes, Danny, no te enfades por favor. Sé que me he portado como una imbécil.
  • No es eso, pero parece que te importa más de lo que pensabas quien soy.
  • Deberías de saber que no es por ti, por lo que eres. Me encanta como eres y a lo que te dedicas, pero tengo mucho miedo. Y siento mucha presión. Porque sé de qué forma hablan las fans de las chicas que salen con vosotros, porque todos mis actos son juzgados por tus tres "hermanos", incluso Tom ya me ha puesto etiqueta sin apenas conocerme. Puede que me esté adelantando, pero si esto sigue así la prensa se enterará, la gente comentará, y eso es mucha presión. No es que quiera esconderme y claro que si me apetece besarte lo haré en público aunque estén mirando todas las fans del mundo, pero te conozco hace un mes y necesito asimilar todo lo que está pasando. Solo te pido que no te enfades y seas un poco comprensivo, es duro asimilar que el chico que te empieza a gustar es un cantante famoso y todo lo que puede suponer eso en mi vida. Y no me voy a poner en lo negativo, no voy a contarte el miedo que tengo a que me rompas el corazón. En resumen se podría decir que estoy acojonada.
  • Dios, ahora que te digo yo. Veamos... Siento haberme puesto tan bruto, no era justo, pero me frustra no poder darte un abrazo o un beso. Me he comportado como un niño pequeño. No quiero que te sientas presionada por nada ni nadie, nadie te juzga. A Harry y Doug les has caído genial y Tom, aunque no lo vaya a reconocer todavía, sabe que te ha juzgado mal, hoy se ha dado cuenta. Las fans, puede que haya de todo, y es verdad que son todo para nosotros, pero no van a modificar mi vida personal, porque eso significaría que tendría que casarme con ellas, sería la única forma de que estuvieran contentas. No pienses en lo que puede pasar si... Ni para bien ni para mal, espero de verdad no hacerte daño. No quiero discutir contigo, quiero que vivamos esos momentos de emoción e ilusión, ese no sé que del comienzo, que todo es bonito y las discusiones no entran en ese paquete.
  • Me parece bien - dije con una sonrisa partida.
  • No se te ve muy animada.
  • Está siendo una noche rara.
  • No debería haber venido.
  • No digas gilipolleces, me ha encantado que vinieras, vuestra actuación, verte... Lo estaba deseando.
  • ¿A si? ¿Así que me echabas de menos? - dijo acercándose poco a poco.
  • De verdad no puedo contigo. Te gusta tocarme los huevos eh!
  • No, realmente me gusta jugar contigo. - y me besó.

Mientras en la puerta Dougie y Mery nos observaban, sin hacer ni un ruido. Cuando nos besamos se pusieron a dar saltitos. Luego se miraron, se rieron y se fueron corriendo para que no les viéramos. Además de salir corriendo a informar a los demás de lo que estaba pasando.

Nosotros tardamos 5 min en salir. Cuando llegamos a donde estaban los demás, incluido Joe, le miré y le dijé.

  • Siento muchísimo lo que he hecho antes. De verdad. No sé que me ha pasado.
  • Fíjate que yo si se lo que te ha pasado, te ha pasado que Danny Jones está demasiado cerca de ti y se pega todo menos la hermosura.
  • Joder con Joe, no sabía que tenías tan mala imagen de mí.
  • Y no la tengo, pero no me transmite confianza lo que está pasando entre vosotros. Esperemos que sean locuras mías nada más.

Danny me miró y yo solo me encogí de hombros. Joe cogió y se fue. Tendría que hablar mañana con él, no entendía nada. Pero por hoy ya era suficiente, no quería más movidas.

A la noche no le quedaba mucho. Yo entré a la barra, pregunte si alguien quería algo de beber, a lo que solo contesto Danny. Le puse una cerveza, yo pensé en ponerme otra, pero me di cuenta que tenía que conducir hasta casa, así que preferí no tomar nada más.

La noche terminaba, no quedaba mucha gente en el bar. Media hora después, entre risas y bailes ridículos, los chicos dijeron de irse, no sabía cómo habían venido, pero como tuvieran que conducir íbamos mal. Tom dijo que él estaba bien, habían venido todos en un coche, así que no pasaba nada. Nos despedimos, Mery con mucha pena, y quedo pendiente otra cuando Mery volviera de visita.

Les acompañé a la puerta para despedirme de Danny.
  • ¿No necesitas que os llevemos a casa no? Porque si no llamas y traigo el coche.
  • Vas tu bueno para llevarnos a casa, además he traído mi coche.
  • Chica previsora.
  • Es que no esperaba que un Príncipe viniera hoy por aquí.

Me sonrió.
  • Nos vemos el viernes. Te paso a buscar a las 7.
  • ¿A dónde me llevas?
  • Es sorpresa.
  • Y que me pongo.
  • Algo que sea fácil de quitar.
  • Imbécil.

Se acercó y me besó.
  • Yo que sé, casual, pero muy guapa. Vamos no vamos de boda tampoco.
  • Eso es fácil.

Volvió a besarme.
  • Vamos Danny que me muero de sueño, grito Tom desde el coche.
  • Corre, no les hagas esperar.
  • Buenas noches princesa.

Y nos dimos un beso, largo e intenso. Luego salió corriendo y se montó en el coche. Esperé a que se fueran y me despedí con la mano. A mi lado estaba Mery, abrazada a mí. Otra que estaba algo perjudicada.

1 comentario:

  1. Es que siempre te digo lo mismo y me repito, pero es que me encanta.
    las conversaciones son tan...naturales, como todos deseariamos hablar siempre y ksdbhkjhbsakbcs puto Danny..
    Raquel con esto solo haces que cuando llegue mayo Bárbara sea un fan girl, grupie que se tire a su cuello xDDDD

    ResponderEliminar