jueves, 7 de abril de 2011

Capítulo 23

Empecé a deshacer la maleta cuando alguien llamo a mi puerta. Era Manuel.
­ Necesito tu ayuda con los regalos de navidad. Podríamos irnos de compras.
  • ¿Ahora?
  • Excepto que tengas otra cosa mejor que hacer.
  • Me encantaría ir de compras contigo.

Pasamos todo el día juntos y fue genial. Compramos un montón de cosas, comimos un montón de porquería y nos pusimos al día. Cuando vivía en Madrid solíamos contárnoslo todo, nos llevábamos especialmente bien. Nos parecíamos muchísimo, aunque era una copia de mi padre.

Nunca os conté nada de Manuel, creo que ahora es el momento. Tiene dos años más que yo y estudiaba medicina, quería ser psiquiatra. Era una de las personas más lista que he conocido. Alto, pelo rizado castaño, ojos verdes como los míos. Era más de cine que de música, igual que Mery era mi compañera de concierto, mi hermano lo era de cine. Siempre preferimos una buena película de acción a una salida a discotecas. Era gracioso y extrovertido, vamos era mi padre de joven.

Era mi modelo a seguir, siempre quise parecerme un poco a él. Así que disfrute de ese día juntos como una enana.

Cuando volvimos a casa, ya estaban mis padres. Pasamos una cena muy divertida, los 5, poniéndonos al día.

Cuando nos quedamos solas mi madre y yo, aun no sé muy bien cómo y porque, le hablé de Danny. Bueno, le conté que había conocido a un chico y que estábamos conociéndonos, que no sabíamos a dónde iba todo aquello, pero disfrutábamos juntos. Mi madre se alegró mucho, siempre tuvo cierta obsesión por buscarme novio. Yo creo que todo empezó el día que le dije que yo estaba muy a gusto soletera y que pasaba de los hombres.

Le pedí que no le dijera nada a papa de momento, que cuando fuera en serio ya se lo diría yo. Y así hizo, bueno eso creo, mi padre nunca me dijo nada.
Y así llegó el día de Navidad, entre celebraciones, comida y más comida, salidas con las amigas, compras y muchos rencuentros.

Después de la comida de navidad, a eso de media tarde, quedamos Manuel, María y yo a tomar un café, en Starbucks, donde sino
.
  • Tía, pues al concierto de Londres va una chica que conocí cuando estuvo McFly en Madrid, se llama Laura, es genial.
  • Genial, no si al final va todo el mundo. ¿Dónde va a dormir?
  • Bueno, es que como va sola y eso, había pensado que podías acogerla en tu casa.
  • Ni que esto fuera un comedor social.
  • Anda Rach, que la niña es un cielo, te va a encantar.
  • Bueno pues ya puedes organizar una quedada antes de que vuelva a Londres aunque sea para conocerla.
  • Ohh muchas gracias.
  • A ver si va a ser una asesina en serie.
  • No tiene cara de loca.
  • Esas son las peores, mas sanguinarias.
  • Joder que envidia me dais, yo quiero ir. – dijo Manuel apenado.
  • Pues vente, no veo el problema. – le dije.
  • Ya no quedan entradas.
  • ¿No quedan entradas? – gritó Mery sorprendida.
  • No, lo miré el otro día y nada, bueno quedan en grada, pero no tiene sentido.
  • Vaya, una pena. – dije yo.

Mery me miro y me dio una patada por debajo de la mesa.
  • ¿Te apetecía mucho venir? – pico María poniendo cara de pena.
  • Pues si te digo la verdad si, hubiera estado genial.
  • Vaya, verdad Raquel que es una pena que no queden entradas.

Cuando quería podía ser muy pero que muy cabrona.
  • Puede que yo tenga una solución para eso. – dije finalmente sin mucho ánimo.
  • ¿Cómo? – pregunto Manuel intrigado.
  • Si, ¿cómo Raquel? – dijo Mery.
  • Tengo un amigo que creo que me puede conseguir una entrada.
  • Pero te va a costar un pastón.
  • Eso Raquel, al final te vas a arruinar. Mejor que se venga al de Madrid conmigo, sé que no es lo mismo, pero bueno.
  • No creo que sea problema de dinero, por eso no os preocupéis. – dije mirando con odio a Mery.
  • Muchos contactos tienes tú en Londres ¿no? – dijo Manuel sorprendido.
  • Si, podrías salir y llamar a tu contacto a ver si puede conseguirla – retó María.
  • ¿Ahora? – me estaba empezando a mosquear.
  • Si, ya sabes, no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy. – dijo con una sonrisa maléfica.
  • De acuerdo, pero luego hablaremos tu y yo muy seriamente.
  • Vale. – dijo sonriéndome.

La iba a matar, no quería llamar a Danny ahora para pedirle nada. Era navidad por dios.

Cogí el móvil y le llame.

  • Hola pequeña, feliz Navidad.
  • Feliz Navidad. ¿Qué tal?
  • Comiendo.
  • Eso está genial.
  • ¿Ya te ha dado Mery eso?
  • ¿Que se supone que es ESO?
  • Entonces no te ha dado nada. – dijo afirmando.
  • No, no me ha dado nada.
  • Pues vete a pedírselo.
  • No quiero verla ahora mismo, estoy muy enfadada con ella.
  • ¿Por qué?
  • Porque me ha hecho llamarte para pedirte una estúpida entrada, y no es momento ni lugar, pero claro tiene que meter baza y como estamos con mi hermano sabe que no me voy a quejar ni voy a decir nada y eso hace que ella tenga el poder, y no me gusta nada que utilice la situación para que yo termine llamándote y pidiéndote una puta entrada.
  • Tranquila, no me he enterado de nada. ¿quieres una entrada para un concierto?
  • Sí.
  • ¿Para qué concierto?
  • Para el de Wembley.
  • Pero tú ya tienes entradas para ese concierto.
  • Ya, es para mi hermano, no quedan entradas de pista y quiere venir, ya lo podía haber pensado antes el puto niño.
  • De verdad sigo sin entender porque te cuesta tanto y te gusta aún menos pedirme cosas de estas.
  • Pues no lo sé, pero no me gusta.
  • Ni que me estuvieras pidiendo cosas todo el día. Esto es una emergencia.
  • Tampoco diría yo que sea una emergencia.
  • Bueno, tú cuenta con la entrada. ¿Qué clase de entrada quieres?
  • ¿Puedo elegir?
  • A ver, yo te daría una entrada VIP, pero no quiero que luego te enfades conmigo.
  • Parezco la mala de la película.
  • A ver, ¿con quien vas a ir al concierto de Londres?
  • Va mucha gente que conozco, pero ir, en plan no poder separarme, pues Mery, una amiga suya, mi hermano y Amy.
  • ¿Si te doy 5 pases VIPS me matas? Piensa que vas con gente que agradecería un montón ver el concierto de esa forma.
  • Quieres que me sienta culpable.
  • No, quiero que seas realista, la vida funciona así. La gente que tiene contactos no suele desperdiciarlos, porque lo vas a desperdiciar. Nadie te va a juzgar por que los aceptes. Y si lo hacen que les jodan. Puede que para ti no sea nada especial eso de los pases VIPS pero seguramente las otras 4 personas mueran por una entrada así.
  • Vale, pero no quiero verlo desde una grada, quiero estar en primera fila, con las demás fans.
  • Está hecho.
  • A ver cómo explico yo lo de los pases VIPS.
  • Utiliza la imaginación o di la verdad.
  • Vale no sigas, que vuelvo a quedar como la mala, porque claro me escondes del mundo y yo lo gritaría a los cuatro vientos y etc, etc.
  • Yo no he dicho eso y tampoco lo pienso. Si quisiera formalizar esto estate segura que ya estaría formalizada.
  • Tienes mucha fe.
  • Mucha.
  • Bueno ¿que tenía que pedirle a Mery?
  • Tu regalo de navidad.
  • MI QUE ¿?¿? – no podía creer lo que me estaba diciendo.
  • Si, tú regalo de navidad.
  • Jones por qué haces eso sin avisar.
  • Como dirías tu muy finamente, porque me sale de los huevos.
  • Ya, pero no es justo que tú compres un regalo y yo no tenga nada para ti.
  • Te preocupas demasiado de las cosas, no estaba preparado, solamente lo vi y supe que te encantaría. Corre no cuelgues y vete a por él.


Entré corriendo al Starbucks, llegué donde estaba María y Manuel hablando tranquilamente.
  • Mi regalo. – dije muy borde.
  • ¿de qué hablas? – dijo María, aunque si sabía de qué le hablaba.
  • Sé un poco educada y pídeselo por favor. – dijo Danny que estaba atento al otro lado del teléfono.
  • Me podrías pasar el regalo por favor.
  • ¿Mi regalo?

No entendía que la pasaba hoy.
  • No, ya sabes de que te hablo.
  • No, lo siento, se más concreta.

Manuel empezaba a flipar, no entendía nada. Que les pasaba a estas hoy. Danny se estaba poniendo nervioso.
  • ¿Qué coño os pasa? Estáis para daros dos leches. Raquel dile que quieres mi regalo por favor que te va a costar una pasta la llamada.
  • No. – conteste a Danny – ella sabe de qué estoy hablando.
  • Porque seréis tan cabezotas.
  • Vale, María podrías por favor darme el regalo de Danny.
  • Ahh, ese regalo, claro toma.

Lo cogí de mala gana y volví a salir.

  • Dios yo es que me la cargo, no sé qué coño la pasa hoy. Primero las entradas y luego esto. Parece que quiere que mi hermano sepa todo.
  • Puede que sea eso, puede que ella también necesite hablar con alguien sobre el tema. La has puesto en una situación complicada.
  • Pues que me lo diga.
  • Claro, porque tú cuando tienes algo claro sueles cambiar de opinión con facilidad.
  • Vale, bueno hablaré con ella.
  • Con amor.
  • Si, con amor. Bueno voy a abrir esto.

Cuando lo abrí no podía creer lo que veía, era la pulsera más preciosa que había visto.

  • Dios, es preciosa, me encanta. Muchas gracias cariño. Es maravillosa.
  • Me alegro muchísimo que te guste.
  • No es que me guste, es que es la pulsera perfecta. ¡Como tú!
  • Oh dios mío Raquel está poniéndose sensible.
  • Que tonto, pues ala ya no te digo nada bonito.
  • Que boba, me gustaría poder verte ahora.
  • ¿Y porque la has mandado y no has esperado a verme para dármela?
  • A eso me da igual, me gustaría verte ahora, porque tengo ganas de verte, no tiene nada que ver con la pulsera.
  • Pues vente a verme.
  • ¿Me estas invitando a ir? Eso sí que es raro, ¿te encuentras bien?
  • De verdad da igual lo que diga o haga, siempre te quejas.
  • Ojala pudiera ir, pero va a ser imposible. Tengo que dejar muchas cosas cerradas antes del 3 de enero. Siempre puedes venir a Bolton a pasar el fin de año.
  • Bueno o podemos esperar a que vuelva el 3.
  • Cagada.
  • No es eso, es que tengo una fiesta de fin de año de nivel. Lo siento.

Danny se empezó a reír.
  • Bueno princesa deberías colgar ya, no quiero que sigas siendo pobre.
  • Eso hasta que no me case contigo o con alguien rico no creo que deje de pasar.
  • A no, eso sí que no te dejo. Porque utilizarme como juguete sexual pase, pero boda por dinero, eso sí que me niego.
  • Que gracioso que eres.
  • Lo sé.
  • Bueno pequeño hablamos mañana. Pásalo muy bien.
  • Tú también princesa.

Y colgué rápidamente. Estaba harta de que siempre tuviera que hacerlo el. Volví a entrar y me senté.

  • Sí que te ha dado de sí la conversación. Pero hay algo que no entiendo, Danny y tu amigo de las entradas son el mismo. – preguntó Manuel.
  • Si, Danny es mi amigo de las entradas. Y ya está todo solucionado, tienes una entrada para el concierto.
  • Genial. Dios al final Danny me va a tener que caer bien. ¿Una entrada cómo la vuestra?
  • Más bien ha conseguido 5 entradas VIPS para nosotros.

Mery se incorporó sorprendida.
  • ¿Y has aceptado las entradas? – preguntó con miedo.
  • Si, parece que no tenía elección.
  • Joder con tu novio. ¿Cómo ha conseguido eso? Y además 5.

No sabía que contestar, Mery me miró diciéndome con la mirada, díselo todo por favor. Pero no estaba convencida. Pero sucedió algo maravilloso, le sonó el teléfono a mi hermano. Se levantó y se fuera a contestar. Qué raro, nunca hacia esas cosas. Que estaría escondiendo él.

  • Por favor Raquel díselo, dile que sales con Danny Jones.
  • ¿Por qué tienes tanto interés en que se entere?
  • Porque necesito hablarlo con alguien, o me voy a volver loca. Es un secreto demasiado gordo y Manuel pregunta cosas y no quiero ser yo quien se lo cuente. Que cuando te vayas soy yo la que estoy aquí con él, tomando café, quedando y a quien hace las preguntas es a mí.
  • Vale, pero hoy no es el momento. Te prometo que antes de irme se lo cuento todo.
  • Gracias. – dijo mientras me abrazaba.

8 comentarios:

  1. Me ha gustado muchooo !! iba retrasada pero ya me he puesto al diaa jajaa ! me ha gustado el cameo que he echo si es que soy yo ajajajja ! Tremenda Mery !!!!

    Perfecto el fiiic ya sabes que me gusta mucho y que has echo muy bien al ponerlo !! Te quiero !

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  2. jajaj parece que Danny conoce mejor a Mery que su propia amiga ajjajaja

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  3. Vale, voy.
    JODER. Me encanta este fic.
    Los dialogos, siempre, siempre me sacan una sonrisa y es que lo peor es que cuanto más os conozco a vosotras más me gusta el fic. xD

    Vamos llega a no aceptar las entradas y entro al blog a pegarla, 5 pases vip y luego pista..OH si, corrida!!

    Y Danny, no, demasiado mono, demasiado para mi salud, es tan jagshhjsghjgjgjgfj que no puedo.

    Que más, ah si, Mary, entiendo totalmente lo de que quiera que Manuel se entere, es que es algo muy gordo...

    Y a ver...más, más...si, QUE QUIERO MAS.
    Hoy estoy glotona de fics que ya que no escribo quiero leerlos xD

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  4. AH se me olvidaba. Necesito ver a Laura en acción.
    Bye. xDDD

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  5. Veamos, como te he dicho dudaba mucho de mi fuerza de voluntad para aguantar hasta mañana sin leer, ya no tengo nada de margen Jaja este fic es genial!!!!!! De verdad! Me encantan los momentos uturistas, no sabes lo intrigada que me quedo. Mery me parece un show de muchacha con unos puntazos Jaja y bueno Rachel y Danny, Kate y Jack. OMFG qué cosas mas adorables!!!!!! Realmente monos :) Bueno, y los McGuys la leche, excepto Tom, tiene el modo mami activado y tiene que relajarse Jaja pero Pudd me mata xD Y creo que no me dejo nada en el tintero... Ah! Que subas pronto! Un besazo! Encantada de leerte ;)
    pD: soy @ThisSummerGirl :)

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  6. Quería decir momentos futuristas Jaja que se me ha ido la F xD

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  7. ooooooooooooooooooooooh! Momento Mery -barra- Rach, xdddddddddddddd Y la conversación de Danny - barra - Rach que monosa, por dios... quiero un novio asi T.T

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  8. Oh! Que copión Danny, Dougie me regalo la misma pulsera antes, tsé! Solo que la mia era mas bonita y me pidio atrimonio siguidamente despues de regalarmela, me encanta el aniño, caxo diamante *__* (k imagiación tengo(L))

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