jueves, 12 de mayo de 2011

Capítulo 32

Este capítulo se lo dedico a mis niñas Ana e Iris, que esta semana están de exámenes y las pobres necesitan unas risas entre libro y libro. 

Y no solo por eso, por como vivieron el concierto de los inglesitos, por gente como ellas escribo estas cosas. Para las que preguntaron si estuve en el concierto, en Valencia y en Madrid. Y viví su música junto a ellas y fue ... no tengo palabras. Gracias morenas! Espero que os guste!!!

La semana pasó volando y llegó el momento de partir hacia Liverpool. Hay que decir que el mundo es un pañuelo, aunque yo de momento no me haya encontrado a Johnny Depp. También es verdad que no me puedo quejar de todos los mocos que han convivido en mi pañuelo. Pero nunca hubo un moco como Depp, pero la historia no va por ahí.

Los días que pasé en Liverpool fueron geniales. Conocí a dos personas que a lo largo de mi vida han sido importantes en muchos momentos. El destino de vez en cuando nos manda regalos y eso sentí yo. Que tenía dos regalos.

Primero hablaré de Laura, esa pequeña con el pelo más largo conocido por el hombre. Realmente el mundo es un pañuelo por cosas como esta. Esta Laura es la misma Laura amiga de Mery, la que conoció en esa firma de discos de McFly.

Yo había hablado algo con ella, ya sabéis comentarios en alguna foto ya que iba a venir a mi casa un fin de semana. Es verdad que al principio pensé que podía ser peligrosa. Bueno para ser sincera nunca lo pensé, pero era mucho más gracioso decirle esas cosas a Mery. Es bonito ver a Mery defender a las personas que le importan.

Pues esa pequeña había sido preseleccionada también. Y es que la vida te depara sorpresas de este estilo. Solo tenéis que sentaros y observar. Aunque no observéis mucho tiempo, o se os pasara la vida.

Cuando nos enteramos no nos lo podíamos creer, era surrealista. Así que durante esa semana no paramos se hablar. Pero lo mejor fue cuando nos conocimos en persona. No nos habíamos visto nunca y se podría decir que nos conocíamos desde hacía una semana, pero la gente del hotel se enteró de nuestro encuentro, más de lo que debería.

Llegue dos horas antes que Laura, decidí ir en coche, sabía que era una paliza pero no sabía muy bien porque pero Danny dio el coñazo para que lo llevara. Su razonamiento que iba a pasar 5 días y que nunca se sabe cuánto te tienes que mover por allí. Lo hice por el dinero, un billete de avión con tan poco tiempo salía carísimo, y pudiendo ir en coche.

Cuando llegó bajé corriendo a recepción y ahí empezó un fin de semana lleno de locuras y momentos raros.

  • Laura. - Dije corriendo y saltando a abrazarla.
  • Raquel. No me creo esto. - dijo abriendo los brazos y riendo.
  • ¿Qué tal el viaje? – pregunté.
  • Pues con retraso, pero ya estoy aquí. Aunque creo que no vamos a tener mucho tiempo para hacer turismo.
  • Ya te digo yo que sí, para eso he traído el coche.

Cuando terminamos de instalarnos tuvimos una reunión en la que nos dieron el horario de los 5 días, las actividades, los días y horas de exposición de cada uno. Iba a ser una semana algo aburrida, o eso pensamos en ese momento.

A mí me toco exponer en el primer grupo, a las 12 de la mañana al día siguiente, Laura en cambio el segundo día a las 9. Realmente estaba genial, tendríamos luego tres días para disfrutar la tarde noche, más bien la noche.

Esa noche la pasamos tranquilas, cenamos en el hotel y salimos a tomar algo. Allí las horas cambiaban y a eso de las 12 ya estábamos en el hotel. Laura se fue a dormir y yo me quedé repasando la exposición del día siguiente.

Cuando me cansé me metí en la ducha, me puse la música y me motivé. Hasta que sonó el teléfono. Puto Jones pensé. Y claro que era Jones, sonaba el mismo cantando en escocés. No pude evitar reírme, hacía gracia.

  • Dios me pillas en el peor momento. ¿Lo haces aposta?
  • ¿Estabas con el otro verdad?
  • Justo, oye ¿y este tono tan gracioso que te has auto puesto?
  • Te encanta.
  • Me hace mucha gracia, eres muy gracioso cuando te conviertes en Paul.
  • Por eso te lo puse, sé que te encanta Paul, mucho más que Jones.
  • Pero que tenga 12 años es una pena, si fuera mayor, le pediría que me llevase de pesca.
  • Y Danny empezó a reír.
  • ¿Qué tal el día pequeña?
  • Pues genial, al fin conocí a Laura, es genial, estuvimos en la reunión y luego cenando algo. Y me has pillado en la ducha que me iba a dormir. ¿Tú qué tal señor guitarrista?
  • ¿Señor guitarrista? ¡A ti se te va! Pues muy bien, debería plantearme preparar todo para mañana, pero acabo de llegar de tomar cervezas con Dougie.
  • ¿A dónde vais?
  • Ni idea.
  • ¿Danny como no sabes a dónde vas?
  • Joder es que viajamos mucho. Mañana te lo digo, te escribo, ¿cuándo te toca exponer?
  • Mañana a las 12. Ya verás como me salga mal.
  • Como va a pasar eso, si hablas sobre nosotros.
  • Bueno hablo sobre el fenómeno fan, y sois el ejemplo.
  • Pues ya está. ¿Si ganas donde te darían las practicas?
  • Creo que la única discográfica es Universal, en USA. Un año allí.

Danny se quedó callado, y supuse por lo que era.
  • Pero puede que haya alguna otra discográfica o que a mí me ofrezca la beca otra empresa Inglesa.
  • Que sepas que me empiezas a dar miedo. No puedes saber lo que pienso solamente por un silencio. Empiezo a ser predecible.
  • No te preocupes que nunca lo serás, pero esa era fácil. Que sepas que yo siento lo mismo.
  • ¿Pero te irías? ¿Todo un año?
  • Seguramente, sería un sueño hecho realidad. Pero no hagamos esto ahora, no nos planteemos cosas que ni siquiera han pasado, no quiero pensar en lo que pasaría si me la dieran.
  • Me parece bien. ¿Qué llevas puesto?
  • Danny no me escuchas cuando te hablo, te he dicho que estaba en la ducha.

Durante dos segundos estuvo callado, sin saber que decir, hasta que se dio cuenta.
  • ¡Ohh! Me gusta eso.


A la mañana siguiente me desperté con una sonrisa en los labios. No sabía porque, supuse que era por algo que había soñado. Me puse Love Drunk de Boys like Girls a todo volumen y me vestí adecuadamente para la ocasión. Elegante. Me encantaba ponerme una camisa y una americana, parecía una empresaria.

Bajé a desayunar y me encontré a Laura tomando café, todavía estaba medio dormida.

  • ¿Cómo puedes tener esa sonrisa desde por la mañana? - preguntó.
  • Pues no sé. - dije sin parar de sonreír.- he debido de tener un sueño maravilloso, aunque no lo recuerdo. Y sobre todo la canción adecuada al principio del día.
  • Probare tu medicina. ¿No estas nerviosa?
  • Muchísimo, tengo un nudo en la garganta horrible. Pero tengo que estar tranquila.

Desayunamos rápidamente, aunque no teníamos hambre, y nos fuimos al salón de juntas. Estaba lleno de gente, universitarios de todas las nacionalidades, iba a ser imposible que me dieran la beca, por mucha Super City que utilizara.

Cada vez estaba más nerviosa, empecé a temblar. Mientras pensaba, por dios Raquel tu puedes hacerlo, tu sueño, dedicarte a la música, no lo jodas.

Y así llego mi momento. A los 5 minutos de la exposición todos los nervios se esfumaron. Parecía que llevaba toda la vida explicando el proyecto. La primera parte de la exposición era todo teórico.

Si ciertas personas hubieran visto mi cara durante la segunda hora de la exposición, hubiera sido algo embarazoso. De verdad ver esas imágenes me hacía sonreír.

  • No sé si todos los presentes conocen al grupo musical de mi estudio. Aquí en Inglaterra podría decirse que son sus niños mimados. Aunque hay que decir que se lo han ganado con esfuerzo. Pero mi trabajo no se basa en hacer una crítica musical sobre ellos o sus progresos en las listas de ventas. Que son muchos.
  • Yo quiero destacar hoy aquí la comunidad virtual que han creado. No podemos olvidar que la música es un negocio. Uno muy competitivo y donde el público objetivo es difícil de delimitar. Ellos han creado una Super City donde juntar a todos sus fans.

Y media hora después y tras mostrar el contenido de la página web, además de todas las herramientas de captación de sus fans, di por terminada mi presentación.

Estaba muy orgullosa de mi trabajo. Así que a la hora de comer nos cogimos unas cervezas y brindamos por ello. No llegó a mucho más, teníamos que esperar a que Laura terminara, pero estaba claro que la noche siguiente iba a ser legendaria. Y lo fue.

Mientras comíamos una chica de pelo morado y ojos claros se acercó a nosotras.

  • Hola, perdonar que me meta así pero os he oído hablar en español y no me he podido resistirme.
  • No te preocupes. – dije mientras la sonreía.
  • ¿Quieres comer con nosotras? – la preguntó Laura.
  • Gracias. – dijo la chica mientras se sentaba.
  • No tienes que darlas, esto no es el instituto y nosotras la mesa de las populares. Si se puede conocer gente está genial.
  • Yo venía con la idea de que esto iba a ser una competición y la gente sería superrancia.
  • Pues conmigo que no cuenten, vale que sea una competición y que ahí arriba haya que competir, pero durante mis horas libres pienso pasarlo bien, así que, si te quieres unir a nosotras estás invitada. Yo soy Raquel. Y ella es Laura.
  • Me gusta ese pensamiento, yo soy Bárbara. ¿De dónde sois?
  • Pues de Madrid, aunque Raquel está viviendo en Londres ahora.
  • Ah tu eres la chica que ha expuesto sobre Super City.
  • ¿Les conoces? – preguntó Laura emocionada.

Lo que me faltaba dos fans locas juntas.

  • Sí, me gustan bastante. Pero me ha sorprendido tu exposición, es como si supieras más cosas de lo que sabe una fan.
  • Realmente es que Raquel no es muy fan.
  • Bueno a ver, no les conozco hace mucho, pero me gusta mucho su música. Y lo de Super City es que he tenido la suerte de hablar con gente de dentro.
  • Es que tiene contactos.

La conversación se estaba tornando hacia un lado que no quería. Bueno más bien que no me convenía.

  • Joder que de puta madre.

Se le notaba en los ojos que quería saber más, pero la daba vergüenza preguntar. No era educado.
  • ¿Y vas a verles en concierto? – siguió preguntando Laura.
  • Pues sí, a Madrid iré seguramente. ¿Vosotras?
  • Pues a Madrid y Wembley yo. Raquel solo a Wembley.

Y un milagro sucedió. Me sonó el teléfono. Era María. Me disculpé y fui a contestar fuera.

  • Hola pequeña ¿qué tal? – me preguntó María.
  • Pues me acabas de salvar. Nos hemos juntado con la única española por aquí además de nosotras y que resulta ser fan de McFly. Y ahí está hablando con Laura sobre ellos.
  • Aah me mofo, el destino te persigue.
  • La pregunta es cuanto sabe Laura de mis contactos.
  • Pues sabe que tienes un novio influyente en el grupo, total puedes conseguir pases VIPS como churros.
  • ¿Le has dicho que es mi novio?
  • Si, porque lo es, y la historia como tú la ves es demasiada complicada para explicar y esas cosas. He protegido su identidad. Suficiente.
  • Eso es, tú haz lo que quieras.
  • Ni lo dudes. Total la mentira va a durar menos de lo que tú crees.
  • ¿Por qué? Que tramas.
  • Yo nada.
  • Pues si no eres tú, que trama él.

María escondía algo. Sabía algo.
  • Cada día estas más paranoica, es porque el día del concierto lo descubrirá.
  • Para eso queda mucho.
  • Vale.
  • Paso de ti. Que sepas que me ha salido muy bien la presentación.
  • Ya lo sabía.
  • Eres odiosa.
  • Pero me quieres por ello.
  • Yo no lo tendría tan seguro.
  • Yayayaya.

Cuando terminé de hablar con María y volví al a mesa Bárbara se había ido a repasar su presentación. Exponía justo después de Laura al día siguiente. Habíamos quedado a cenar las tres juntas y salir a tomar algo, por conocer un poco Liverpool.

Como Laura también quería repasar subimos cada una a nuestra habitación. Me puse la televisión y me quedé dormida hasta que me llegó un mensaje. Era de Danny.

Lo siento.

Solo ponía eso. Me asuste. ¿Qué habría hecho?

Pensé en llamarle pero en ese momento llamaron a mi puerta. Era Laura, se aburría. Me vestí y salimos a dar una vuelta, quedaba media hora para cenar.

Cenamos, fue genial. Bárbara era genial. Me reí mucho esa noche. Y después de cenar decidimos ir a tomar algo. Subimos a por los abrigos y cuando íbamos a salir del hotel paso algo inesperado. Ahora ya entendía todo. La conversación con Mery, el mensaje.

Estaba tan alucinada que ni me di cuenta que estaba hablando en alto.
  • No me lo puedo creer.

Es que no me lo podía creer. Laura y Bárbara que estaban de espaldas a la puerta se dieron la vuelta mirando en dirección a la puerta.

Fliparon, pero fliparon más cuando me acerque a saludarle. Porque no esperaban ver a Danny Jones allí, pero menos esperaban que yo le conociera. Bueno a lo mejor eso no les hubiera flipado tanto, pero que me besara sí que hizo que fliparan.

Me acerque lentamente hasta él. No podía ser verdad. Que huevos hacía en Liverpool.

Estaba parado en la puerta, sonriendo. Esperando mi reacción.

Yo llegue hasta él, me paré delante suya y tuve la necesidad de abrazarle. Había una parte de mí que creía que era una alucinación.

  • Dios me estas abrazando en público.
  • Si, tenía que comprobar que eres real.
  • ¿Esas dos que nos miran son tus amigas?
  • Creo que sí.
  • Pues están flipando.
  • Yo también, así que no me extraña. ¿Qué haces aquí?
  • Lo de siempre, promoción y conciertos.
  • A todas estas nosotros seguíamos abrazados.
  • ¿Dais un concierto aquí? ¿Por qué no me habías dicho nada?
  • Primero porque quería darte una sorpresa y segundo si te digo que tengo un concierto puede que te de una locura y compres entradas o algo parecido.
  • Y eso sería fatal. Vamos que se vendan tus entradas te tiene que preocupar.
  • Pero no quiero que te gastes el dinero pudiendo darte yo una entrada.
  • Bueno da igual. No voy a discutir contigo. Parecemos un disco rayado.
  • ¿Entonces te alegras de verme?
  • Mucho.
  • ¿Y vamos a quedarnos así mucho tiempo? Es por pedir unas pizzas, me muero de hambre, que llevo toda la tarde trabajando.

Me separé de él. Le cogí de la mano y me encaminé hacia las chicas. De repente note como Danny tiraba de mí para que me parara. Me paré y le miré.
  • Antes de ir para ya, leíste mi mensaje.
  • ¿El de lo siento?
  • Si, ese.
  • Si lo leí.
  • Vale, pues reitero el mensaje.
  • Tampoco es para tanto. No hace falta que lo reiteres.
  • Yo creo que sí.

Me cogió por la cintura, me acercó hasta él y me besó. Me cago en tu puta madre pensé. Pero es cierto que no me podía resistir a sus besos, así que yo también le bese.

Cuando terminamos, me soltó, se apartó, me miró y esperó la reacción. Yo solo pude poner mis manos alrededor de mi boca y mi nariz. Así que respiré dos veces y preferí no opinar.

  • Te has puesto roja.
  • Mejor cállate y vamos.

Le volví a coger de la mano y andamos a donde estaban las chicas. Que se habían quedado flipadas.

  • Bueno te presento. Estas son Laura y Bárbara. Supongo que no os tengo que decir quién es.
  • Hola, encantado.
  • Y si, es una sorpresa para todas encontrarnos al señor Jones por aquí. Y si, es mi contacto dentro y el que me ha conseguido las entradas para Wembley. Aunque ya tuviera otras.
  • Me disculpo en su nombre por cómo se está comportando, no la sienta bien las muestras de cariño en público. – dijo Danny mientras se reía.

Yo le sonreí con cara de pocos amigos.
  • Siento preguntar – dijo Bárbara. - ¿tocáis aquí estos días?
  • Si, mañana.
  • ¿Quedan entradas? – volvió a preguntar.
  • Eso da igual, porque vamos a ir a verles. ¿Verdad Danny?
  • Eso parece. – dijo Danny riendo.
  • ¿De verdad? – dijo Laura sin poder creerlo.
  • Tenéis suerte, la habéis pillado mosqueada. Solo hace estas cosas cuando se mosquea.
  • Muchas gracias Danny por tu sabiduría del estado de ánimo de Raquel. ¿No te morías de hambre? Pues vamos a cenar. ¿Os venís chicas?

Se miraron y asintieron con la cabeza.

4 comentarios:

  1. :') Qué grande eres!!! no tienes nada que agradecer!! soy yo las que os tiene que dar las gracias a todas por conseguir que fuese al concierto, por que fue increible!!! (ni yo me creo como me lo pasé, salté y canté como una loca no, como una posesa!!! jajajaja) y os debo mucho!! y a mi nena, por supuesto, otro tantísimo más!!!
    Con estos capitulazos las risas siempre están seguradas 100%!!! son buenísimos, me encanta tu naturalidad, porque a medida que vas leyendo te vas imaginando todas las situaciones a la perfección y eso es genial!! no lo consigue todo el mundo!!
    Muchísimas gracias por todo, por el concierto, por el placer de conocernos, por los ánimos que me das cada día, y por estos pedazos de capítulos que me escribes!! Muacksss!!! Te quiero ídola!!!

    ResponderEliminar
  2. Ufff con el sms de LO SIENTO tube miedo!! pero nooo todo va viento en popa!!!
    ME FLIPA ENSERIO
    me encanta cuando te enrollas con cosas en plan lo de Jonny Depp!xDD
    uN BESOTE

    ResponderEliminar
  3. Raquel!! :') lo primero de todo gracias, muchas gracias! Por todo! :D El concierto... buah esque no creo que en mi vida haya tenido un día mejor y con mejor compañía! Me alegro mucho de haber llevado, casi a rastras, a Iris a la quedada, porque conmigo sola no quería venir, y María y tú la animasteis y ahora no se pone de los nervios cuando me pongo pesada con McFly muajajaja y además vino al concierto, y así tuve a mis dos mejores amigas allí, y eso os lo tengo que agradecer en gran parte :D... y bueno, iba a decir que el capítulo sin palabras, porque decir que Danny es perfecto, está ya muy visto xD pero este capítulo tiene mucho que comentar... Creo que conozco a ciertas chicas de tu fic.,.. me resultan familiares... Don't know why... jaajajajajaja me ha echo una ilusión que metieras a Laura y Bárbara *____* en serio! jajaja ha sido totalmente sorpresa! Lo de Laura no tanto, porque ya habías hablado de ella, pero cuando he leído "pelo morado y ojos claros" ha sido como...AAAHHH ES BÁRBARA LO SÉ LO SÉ! jajajaja me he emocionado xD Por cierto, me he quedado como O__O con el sms...xD luego tampoco ha sido para tanto joer xDD Y nada, que como ya sabes, me encanta, adoro, amo, idolatro, y un gran etc de adjetivos que mi corto vocabulario no conoce xD Y muchísimas gracias otra vez, es la primera vez que me dedican un capítulo, y que sea de este fic, es too emotional *_* Love you girlie! :D

    ResponderEliminar
  4. MAdr emia, que hombre este.......... La liará parda, como siempre. XDDDDDDDDDDDDDDD

    ResponderEliminar