viernes, 7 de octubre de 2011

Capítulo 3 - 2º Parte


Las semanas pasaban más lentas de lo esperado. Dolía verle cada día, sabiendo que iba un paso por delante en eso de reconstruir su vida.
Intentaba tener la mínima relación con ellos cuatro. Iba de la sala de ensayo a la discográfica intentado ni verles por los pasillos. Pero no siempre funcionaba.

El trabajo era maravilloso y el equipo, era un equipo de verdad. Una mañana, mientras desayunaba y me preparaba para ir a la discográfica, llamaron a la puerta. Era un mensajero. Traía un paquete enorme.

Mierda, pensé. Se me había olvidado por completo. Era el regalo del cumpleaños de Danny. Lo había encargado hacía tanto tiempo que ni siquiera lo recordaba. Metí el paquete y lo observé durante un buen rato.

Eran cuatro cuadros para el salón. Los tres primeros describían sus tres etapas musicales, por las que había pasado en los últimos 8 años. Pop-playero, rock y electropop.

Había recuperado fotos, recuerdos, vivencias, concierto y cortes de pelo. Cada cuatro tenía una tonalidad totalmente distinta. Habían quedado perfectos.
El cuarto cuadro, en cambio, estaba en blanco. Al verlo me quedé paralizada. La idea era rellenarlo juntos, durante los siguientes años. Pero parecía que eso no iba a pasar.

Le di la vuelta al lienzo en blanco y leí.

Aquí no termina tu regalo. Quedan 5 años para cumplir los 30 y tienes muchas que hacer. Estos cuatro cuadros simbolizan tu veintena. Ya has quemado 5 años, así que tienes que aprovechar los otros 5.
Si, el último está en blanco, ahora te toca a ti elegir con que quieres rellenarlo. Haz una lista detrás del cuadro nº3 con las 10 cosas que hacer antes de cumplir los 30. Puedes ver que la primera cosa de la lista está ya puesta. ¿Qué haces esta noche?

Me acerqué a ver el 3er cuadro. Detrás había una lista. Solo la primera de la lista estaba escrita.

  •    Coge un avión esta noche a cualquier lugar del mundo. No pienses, solo vive.


Se me hizo un nudo en el estómago. Era todo tan perfecto cuando encargue el regalo. Era el regalo perfecto.

¿Qué iba a hacer con él? Supuse que lo mejor era dárselo, me había costado mucho y no solo de dinero sino también de trabajo. Tenía que meditarlo, aunque no era el momento adecuado, llegaba tarde al trabajo.

Esa mañana los chicos la tenían libre, así que decidí aprovechar y pasarme por el estudio a dejar todo preparado para la reunión del día siguiente. Ya estaba todo listo y en un par de semanas saldríamos de gira. De gira de Meet&Greet
Estaba muy emocionada, tanto trabajo duro daba ahora sus frutos. Me puse buena música de camino al trabajo, aparque canturreando y subí a la sala de reunión.

  •    ¿Qué huevos hacéis aquí en vuestro día libre? – dije sorprendida.

Tom, Dougie y Harry se miraron divertidos.
  •    No va a venir, tranquila. – rió Harry.
  •    No me interesa y esa no es respuesta a mi pregunta. – dije molesta.
  •    Estamos aquí para preparar la fiesta de cumpleaños de Danny. Es la semana que viene. – dijo Tom con tono informativo.
  •    Se cuando es su cumpleaños ¿Y este es el lugar adecuado para prepararlo? – pregunté extrañada.
  •    Es cosa de Emma. – dijo Dougie con tono de desaprobación. – Quiere hacer una fiesta por todo lo alto.
  •    Que suerte. Jo que bien lo vais a pasar. Emma tiene mucho estilo. – dije con tono irónico.
  •    Nos podrías ayudar, todos sabemos que tienes un don para estas cosas. – pidió Harry.
  •    No creo … - comencé a decir.

Pero llegó Emma. A decir verdad era una chica muy atractiva, ojos penetrantes y mucho estilo.
  •    Hola chicos. – dijo en un tono de voz demasiado agudo. – Ahhh tú. – añadió al verme.
  •    Si, hola yo. – conteste con una gran sonrisa.
  •    Pensaba que era una sorpresa. No creía que iba a transcender a más personas. – dijo muy seria y mirando a Harry.

Dougie puso cara de pocos amigos y fue a contestar. Pero no le dejé.
  •    ¿Es que habíais quedado? No tenía ni idea. Ya sabes, yo trabajo aquí y lo normal es que venga. Más bien me habéis jodido el plan, porque pensaba que los chicos no estarían hoy aquí. Pero vamos ahora os dejo, total tenéis que esperar a Danny y todos sabemos que siempre llega tarde. – terminé con un tono similar al suyo.
  •    Dan no va a venir. – contestó orgullosa.
  •    ¿No? No me digas que te manda a ti en representación suya. ¿No le iras a quitar el puesto? No es nada personal con Danny – dije remarcando el ny – al cual no tengo mucho aprecio últimamente, pero el niño tiene la voz más maravillosa del mundo. No está bien que cantes por él.
  • La acababa de dejar sin palabras, no sabía que contestarme. Mantuve la sonrisa en mis labios. Los chicos reían disimuladamente.
  •    ¿Me estas vacilando? ¿No sabes que la semana que viene es su cumpleaños? – dijo orgullosa de tener el control.
  •    ¿Es su cumpleaños? A pues ni idea chica. Qué bien. Anda por eso estáis aquí sin Danny. Pues organizarle algo bonito. Ya sabes muy ostentoso, eso a Danny le encantará. Un consejo, no pongas tarta, odia la tarta. Aunque siendo su novia seguro que ya sabias eso.

Seguía alucinada. Vi temor en sus ojos, temor y expectación.
  •    ¿No te vas a quedar a preparar con nosotros? – preguntó Tom divertido.
  •    Uh no Tom, como me dices eso. Tengo que preparar un montón de cosas para mañana. Se además que Emma lo hará genial. – dije con una gran sonrisa.
  •    ¿A la fiesta si vienes no? – pidió Dougie.
  •    No sé yo, puede que sea violento. – dijo Emma rápidamente.

Dougie la ignoró y dijo.
  •    Sabes que a Danny le gustaría que fueras. – dijo serio y mirándome a los ojos.

No podía estar pidiéndome algo así. Era doloroso verle por los pasillos imagínate lo que sería verle celebrando su cumpleaños. Sin ser yo quien le organizara nada. Más que eso, sin tenerle a mi lado. Pero los ojos de Doug me mataron. Me suplicaba que fuera, incluso que me quedara allí con ellos.

Después de salir de recuperación Dougie y yo teníamos una conexión especial. El me agradecía sin palabras lo que había hecho por él. Y yo agradecía que volviera a sonreír de esa forma.

  •    Bueno señor Poynter, si me lo pide así. Pero con dos condiciones. – dije retando a Emma.

Emma me miró con muy mala cara, no le gustaba. Cosa que era recíproca.
  •    Quiero que Danny haga un striptis.

Todos me miraron extrañados, aunque los chicos no tardaron en reírse.
  •    A no, perdonad eso no debería haberlo dicho en alto. No, las condiciones son tequila y que Dougie sea mi pareja. Vamos a liársela parada a la prensa. – dije divertida.
  •    No creo que sea adecuado lo tuyo con Dougie. Danny debe ser el centro de atención. Es su cumpleaños. – dijo preocupada.
  •    Vaya, es verdad, se me olvidaba que tu relación se basa en eso. La prensa. Llámame puta si quieres pero yo iré con Dougie, vamos si al rubito le parece bien. – dije desafiante.
  •    Yo estoy de acuerdo. – dijo sin dejar de reír.
  •    Ah pues todo claro. Si necesitáis algo avisadme. Soy una maquina buscando sitios de fiesta en Londres.

Les tiré besos a todos, incluido a Emma y salí a terminar mi trabajo. Iba a ser una fiesta divertida.

La semana pasó rápido, todo estaba listo para el cumpleaños, la gran fiesta que Emma y los chicos habían preparado. No me convencía el hecho de tener que ir a la fiesta y menos si todo era idea de ella. Aunque había que reconocer que me hacía gracia el tema de poder fastidiarla cara a cara y más teniendo en cuenta el regalo que tenía preparado para Danny.

Llevábamos una semana horrible, de reunión en reunión, preparando todo lo que quedaba para la semana siguiente, no quedaba más que una semana para irnos.

La mañana antes de su cumpleaños me paseaba de arriba abajo por el estudio, iba distraída hablando por teléfono y bebiendo agua, cuando me choqué con alguien. Lo que hizo que parte del agua de la botella terminara sobre mí.

Me giré y le vi plantado delante de mí, conteniendo la risa, no podía ser otro que el señor Jones. Cuando me reconoció empezó a reír sin poder contenerse.  

  • Fletch te llamo en 10 minutos. Danny la está liando. … No, nada que no pueda solucionar. – colgué el teléfono y lo guardé en el bolsillo.
  • Eh rubia, ha sido sin querer, no era mi intención. – dijo alejándose y sin poder parar de reír.
  • No es para nada gracioso Daniel. Ahora estoy mojada. – dije acercándome hacía él.
  • Seguro que encuentras una solución a ese problema, eres una chica apañada. – seguía riendo.
  • Venganza, esa es la solución. – y salí corriendo tras él.
  • Noooo. – gritaba mientras intentaba defenderse.

Me bloqueó la mano en la que llevaba la botella e intento tirarme lo que quedaba de agua encima. Empecé a reírme, más bien me dio un ataque, aunque intenté no bajar la guardia. La pelea continuo unos minutos, intensos minutos. Terminamos empapados y sin comprender muy bien como, tirados en el suelo uno encima del otro. Danny apartó el pelo de mi cara lentamente, nuestras miradas se encontraron, mi respiración se empezó a acelerar, la distancia entre nosotros era mínima. No era nada sano tenerle a esa distancia. Una alarma se accionó dentro de mí, peligro gritaba una vocecita. Y sin saber como me levanté de encima suya y me fui hacia la sala de ensayo convencida de lo que tenía que hacer.

Entré dando un portazo y me miraron extrañados por mi aspecto mojado.
  • Dougie lo siento, pero no voy a poder ir mañana a la fiesta de … Bueno eso. – dije nerviosa y avergonzada.

Me miraron extrañados. Al fondo apareció Danny con el semblante serio cambiándose de camiseta. Harry le vio y junto detalles.
  • ¿Por qué? ¿Ha pasado algo? – me preguntó Dougie preocupado.

Harry le interrumpió para que se fijara en Danny. Tom que estaba atento a todo también se dio cuenta.
  • ¿Estás bien? – volvió a preguntar esta vez Tom.
  • Si. – mentí. – es que me han puesto un examen para el lunes y tengo poco tiempo para estudiar. – volví a mentir.
  • Claro. – me contestó Harry negando con la cabeza.

Dougie le hizo callar con un puñetazo en el brazo.
  • Bueno, dejemos la historia así, aunque … Necesito que me hagáis un favor. Tengo un regalo que quiero que le llevéis a Danny mañana a la fiesta. ¿Podríais pasaros a buscarlo? Quiero que lo tenga pero no tengo fuerza para dárselo yo.
  • ¿Le va a gustar a Emma? – curioseó Dougie.
  • Es muy bueno, supongo que se podría molestar un poco. – dije orgullosa.
  • Entonces déjame hacer los honores. – puso cara de maldad.

La tarde siguiente llego antes de lo esperado. Cuando Dougie llegó a buscar el cuadro estaba tirada en el sofá viendo la televisión tan concentrada que el sonido del timbre me asustó.
  • ¿Tú no tenías que estudiar? – dijo entrando y guiñándome el ojo.
  • Dougie deja de ser tan amable, no me gustas, tu y yo no tenemos ningún futuro juntos. – y cerré la puerta.
  • Deja de decir payasadas ¿Dónde está el regalo? – dijo ansioso. – Quiero verlo.
  • Pues está envuelto. Es todo eso. – dije señalándole los cuatro objetos apoyados en la pared.
  • ¿Me estás diciendo que es todo eso? ¿En qué coño pensabas? Es tu ex.
  • Vamos a ver, no lo era cuando los hice. Me costaron mucho dinero y trabajo. ¿Qué quieres que haga con ellos? Son tan bonitos. – dije con tristeza.

Dougie me rozó la mano y asintió. Le expliqué como debía darle los cuadros y vi una luz de maldad en sus ojos. Quedó en llamarme mientras los abría, para que supiera su reacción al ver el regalo.

Llegó un momento de la tarde que me aburría tanto y estaba tan nerviosa que decidí ir a ver a Joe. Con suerte habría música en directo y haría que me distrajera. O eso esperaba. Cuando llegué al bar no había mucha gente. Al fondo, en el escenario, una chica morena y menuda, afinaba su guitarra.

Saludé a Joe que me miró a los ojos y me preguntó por la fiesta de cumpleaños, quería saber si me habían invitado. Tras contarle toda la historia me invitó a una cerveza.

  • A mí no me engañas, fuiste tú quien más escuchaste a Dougie cuando estaba jodido, crees que es adecuado darme de beber, mira como terminó. – dije divertida.
  • Tú no estás deprimida y sabes que el alcohol no va a hacer que duela menos. – y salió a charlar con la chica del escenario.

Se la veía especialmente nerviosa, como si se jugara algo con esa actuación. Cosa que era así, un productor musical iba a dejarse caer esa noche por el bar.

Tardó mucho en empezar a tocar, justo en el momento que mi móvil empezó a sonar.
  • Rubia aquí enviado especial Lagarto Espacial. – dijo emocionado.
  • ¿Y ese nombre? ¿Los había bonito cuando lo elegiste? – estaba muy nerviosa.
  • Calla, ha cogido el paquete, está Tom contándole como funciona todo. Mira extrañado, no quiere abrirlo delante de todo el mundo.

En ese momento me arrepentí de no haber ido y verlo con mis propios ojos.
  • Dios, no soporto a su novia, ven aquí y mátala antes de que lo haga yo.
  • ¿Qué hace? – me estaba desesperando.
  • Le está diciendo que lo abra, Danny no quiere, pero todos sabemos que lo terminará abriendo.

Mi corazón empezó a palpitar a 100 por hora.
  • Tendrías que ver su cara ahora Rach, se ha quedado helado. Es una pasada de cuadro.
  • ¿Le gusta? – era horrible no poder verle yo misma.
  • Va a llorar de la emoción. Está abriendo el segundo, ese sí que mola, normal porque somos guapísimos. ¿Sabes que mi cumpleaños es en noviembre?

Me hizo sonreír, no podía para de dar vueltas.
  • Lo mejor es la cara de Emma – siguió narrando Dougie. – Está verde de envidia. A ver que le regala ella. – dijo con maldad.
  • Oye pobre chica, suficiente que le ha montado la fiesta. – sí, me uní a su maldad.
  • Vale, va el cuarto. ¿Por qué está en blanco?
  • Que le dé la vuelta y lea. – le recordé.
  • Es verdad. JONES DALE LA VUELTA Y LEE. – le gritó.

Cosa que hizo que Danny se diera cuenta que Dougie no estaba a su lado y hablaba por teléfono.
  • Vale, ya está leyendo, se ha emocionado. Me está mirando. Parece que se acerca.

Que estaba pasando, me estaba asustando.
  • ¿Es ella? – le escuché al otro lado.
  • ¿Quién es ella? – se hizo el tonto.
  • Dougie. – le dijo muy serio.

Dougie no se hizo de rogar y le pasó el teléfono.
  • ¿Rachel? – preguntó.
  • Feliz cumpleaños. – fue lo primero que se me ocurrió.
  • Eso ha quedado claro. Gracias por los regalos pero eso no ayuda a la distancia. – parecía molesto.
  • Nadie dijo que yo tuviera que dejar distancia. Se supone que tu has rehecho tu vida. ¿No?
  • Las cosas no funcionan así, esto no está bien. – y le devolvió el teléfono a Dougie.

Dougie se enfadó.
  • Eres subnormal Danny. Te acaba de dar el mejor regalo de todos y parece que encima te fastidia. Eres un puto desgraciado.
  • No es tu puto problema, así que no me toques los huevos.

Me había colgado el teléfono enfadado, enfadado por el regalo que le había hecho. Me enfade, pero que se creía. Volví dentro del bar y me senté en la barra.

Cada vez había más y más señales de que lo nuestro no tenía solución. Pero cuando te das cuenta realmente de eso duele, duele demasiado. No tenía ganas de hablar con nadie, ni dar explicaciones de mi estado de ánimo, así que volví a casa sin ni siquiera despedirme de Joe. Sabía que si me veía la cara en ese momento preguntaría demasiadas cosas.

Joe se había convertido en un padre para mí, y tenía la sensación que con todo esto, había empezado a coger un poco de manía a Danny. Realmente no pretendía que pasara algo así, pero supongo que le había puesto en el medio, era mi culpa.

Seguía sin poder parar de darle vueltas a la conversación por teléfono, quería ir a la fiesta y pegarle una bocetada.

Abrí el armario donde guardé las cajas, las cajas llenas de recuerdos, tenía ganas de cogerlas y tirarlas por la ventana, pero aprendí que un día, cuando el dolor se hubiera ido, cuando no doliese mirar los recuerdos a la cara, ese día, sería bonito mirarlos y recordar, con algo más que imágenes en el cerebro, aquellos viajes, aquellas caricias, aquellos besos ahora apagados, extinguidos.

Y vi la guitarra, esa preciosa guitarra, con su funda con un gran lazo rojo. Recordé como, cuando me la regalo.

En los últimos años había perdido tantas cosas. Era cierto que Valdeteja fue una etapa y las etapas se queman y se dejan atrás, pero el día que descubres, delante de tu ordenador que acabas de quemar esa etapa y que no hay vuelta atrás, duele, duele por todo lo que significó para ti, eso que no volverás a vivir aunque muchas veces lo desees con todo tu corazón.

Con Danny paso lo mismo, hasta que no le vi con ella, con ella y no conmigo, hubo una esperanza que al rencontrarnos, nos comeríamos nuestro orgullo y solucionaríamos todo, que pediríamos perdón por esas palabras que nos dijimos. Pero eso no iba a pasar y dolía darse cuenta.

Pero esa preciosa guitarra no tenía la culpa, era hora de desenterrarla y devolverle a la vida. Danny me había enseñado a afinarla y a tocar algún acorde, aunque no servía para mucho.

La afiné sentada en el sofá y cuando estuvo la puse sobre la mesita del salón. Tenía que aprender a tocar la guitarra, sí. Hablaría con Tom para que me dijera si alguien podría darme clase.

Puse música y me senté en el sofá, bueno antes cogí una cerveza para amenizar el rato. Tras cantar a grito pelado un par de canciones deprimentes, sonó Never again de Kelly Clarkson (http://www.youtube.com/watch?v=wu6RBV96RyY ) y mi motivación llego a tal punto que termine subida al sofá, con cerveza cual micrófono, saltando y viviendo cada palabra de la canción. Pero el momento no duró demasiado, un loco empezó a golpear mi puerta.

Me asuste un poco pero la voz me pareció familiar. Me acerqué sin hacer ruido, aunque teniendo en cuenta el jaleo no era fácil escuchar mis pasos. Miré por la mirilla y le vi. Por un lado estaba aliviada de que no fuera un loco. Abrí la puerta rápidamente, mis vecinos se iba a asustar.

  • ¿Se puede saber que te ha hecho mi puerta para que la trates así? - que hacia aquí.
  • No, has sido tú la que me has hecho algo. - dijo demasiado fuerte.
  • ¿Ahora que he hecho? ¿Puedes entrar y explicármelo? - dije preocupada por los vecinos.
  • No quiero entrar en tu casa. - seguía gritando.
  • Pues o entras y te tranquilizas o te vas a tu puta casa Daniel.

Me miro con cara de pocos amigos y entró en el apartamento. Vi como miraba la guitarra sobre la mesa, se dió la vuelta y golpeo una banqueta.
  • Te puedes tranquilizar y contarme que huevos te pasa. Se supone que debes estar feliz, es tu cumpleaños.
  • Si, se suponen tantas cosas, como que tu ex no te regale algo tan perfecto y que además no se digne a dar la cara. ¿Porque no has venido a la fiesta?
  • De verdad no creo que vengas a gritarme que te encanta mi regalo, cosa que no me extraña, es una pasada.
  • No es el momento de autoalagarse Raquel digo Rach.
  • Mira que me gusta que me llamen Rach, pero tío odio que me lo llames tú. Pero bueno el caso es que no he ido a tu fiesta porque tenía que estudiar. - mentí.
  • Claro que sí, ¿y desde cuando estudias con cerveza y música de Kelly Clarkson?
  • Desde que me dejaste y me salió de los huevos. ¿Por qué te tengo que dar explicaciones? Pensaba ir, pero no me gusto el juego del agua del otro día y preferí distanciarme. Ya ves, no me pareció adecuado.
  • Claro y si te parece adecuado hacerme ese regalo. ¿Tú sabes el problema que me has creado con Emma? ¿No lo ves verdad?
  • ¿Pero te crees que me importa Emma lo más mínimo? Me la toca Emma y si se enfada. Si se enfada es que su regalo ha sido una basura comparado con el mío. - sabía que tenía razón, en el fondo lo sabía.
  • Respétala, es mi novia.
  • ¿Ella me respeta a mí? - dije ofendida.
  • No sabes nada de nada. ¿Por qué me lo pones tan difícil? ¿Por qué has vuelto?
  • ¿¡Perdona!?! He vuelto porque tengo una vida aquí independiente a ti que no pienso tirar por tierra. Te quedaste mi corazón y he vuelto a recuperarlo, te guste o no. Ya no te pertenece.
  • ¿Entonces a que viene el regalo?
  • Porque ese regalo lo encargue cuando estábamos juntos y como puedes entender no lo voy a colgar en mi salón. Además no veo el problema, no hay nada en esos cuadros que te pueda recordar a mí. No tiene porque ponerse celosa. Excepto que no tengas claro que sientes por cada una de nosotras.
  • Ten claro que están claros, cosa que no se si tú lo tienes claro. - dijo mientras se acercaba.
  • Daniel ni se te ocurra acercarte a mí. O voy a tener que doblaste la cara. - dije dando un par de pasos para atrás.
  • ¿Tienes miedo? - y siguió acercándose.
  • No voy a jugar a tu juego de seducción. Conmigo lo es  todo o nada, y ahora no quiero nada que tenga que ver contigo en el terreno sentimental. Nada ¿te ha quedado claro o tengo que llamar a los chicos para que vengan a por ti?
  • No te metas entre ellos y yo. - dijo amenazante.
  • ¿De verdad crees que me interpondría entre vosotros? Qué imagen tienes de mí. Vete Danny por favor. No merece ni la pena todo esto. Haz lo que quieras con los cuadros, puedes tirarlos, venderlos y donar el dinero a caridad o llevar a tu novia de crucero pero a mi déjame vivir en paz.
  • Deja de ser tan perfecta de una puñetera vez. De verdad, déjalo. - había dolor en sus ojos.

Nos quedamos parados mirándonos unos segundos.
  • Ya podías haberme traído tarta. - dije para relajar la tensión.
  • Ojalá hubiera tarta, si hubiera habido tarta todo habría sido distinto.
  • Ya, demasiado vulgar, tú te mereces algo más exclusivo.
  • Puede ser, aunque te puedo asegurar que para mí la tarta era perfecta.
  • Lo sé, para mí también lo fue.


9 comentarios:

  1. Aqui Miri8717 retransmitiendo para Rach_soylacañaescribiendofics

    Buah, chica: GENIAL. ¡Como siempre! Hay de todoooo: dolor, amor, tensión sexual, bromas, malicia (me encanta la malicia jijijij), Dougie... (soy una acérrima fan de tu Dougie jajajaja)

    El párrafo que me ha llegado:
    "(...) y las etapas se queman y se dejan atrás, pero el día que descubres, delante de tu ordenador que acabas de quemar esa etapa y que no hay vuelta atrás, duele, duele por todo lo que significó para ti, eso que no volverás a vivir aunque muchas veces lo desees con todo tu corazón." BRUTAL. EXACTO. ME HA LLEGADO MUCHO, EN SERIO.

    No se que más decir... que me quedo con ganas de MÁS MÁS Y MÁS. Espero tus capitulos como espero los de Supernatural, con expectación.

    ResponderEliminar
  2. oh dios mio como me he quedado, es decir ploffffffffffff!
    no puedo ni escribir, madre mia. La ultima parte ha sido matadora, yo te lo juro, pensaras que me meto mucho en el fic y eso, pero estoy ahi y soy rach y le meto tres leches a danny.
    Bueno la parte del capitan dougwash ha sido genial, nos has leido la mente a todas respecto a la zorra de la novia de danielo.
    Fijo que me quedan muchas cosas por escribir, pero esque me he quedado fatal asique solo digo que continues con el fic y que quiero ir a valdeteja xD besos

    ResponderEliminar
  3. Aquí Minara intentando recuperarse de tant perfeción en un sólo capítulo. Raquel deja mal a Emma, Doug colabora, hay tensión entre estos dos... ¿qué más se puede pedir? Ah sí, que el zopenco de Mr. Jones reconozca que sigue colgado de Raquel y vuelvan juntos... pero todo llegará xD

    Sube pronto, please!!
    Xx

    ResponderEliminar
  4. AAAAAH NO pero que capitulaso!!! me encanto! genial genial, lo ame!! sera que soy una loca de mierda pero tu novela la siento re personal, como si me pasaran las cosas ami.. es re flashero jajajaa
    Seguila proooonto, besotees

    ResponderEliminar
  5. Raquel, ya es definitivo!
    Cásate conmigo (?)
    Bueno, dejo de fliparme ya >.<
    Que puedo decir?
    HOLA, ACABO DE MORIR x)
    Me encanta Rachel, me encanta Doug, Tom, Harry, Danny aunque se ponga tonto, incluso me encanta Joe y la tía esa que estaba cantando, pero odio tanto a Emma, que me encanta como la dejas en ridículo.
    Momento en el que pienso, Que Dios David ni leches, aquí Raquel, un Diosa superior (?)
    Si, yo sigo con mi motivación modo ON*
    Bueno, muchacha, que me ha encantado, este y un capitulo en que hablabas sobre la música de mis preferidos *creo*.
    Te quiero a ti y a tu forma de escribir, espero la respuesta a la propuesta de matrimonio xDDDD!

    ResponderEliminar
  6. dios dios dios dios y DIOS
    entre lo de el agua
    y luego cuando va a su casa
    enserio, he muerto LKDNEDVFDEVYVDU
    -Deja de ser tan perfecta de una puñetera vez. De verdad, déjalo.
    OH DIOS MIO, VEN AQUI DANNY Y HAZME MUJER
    a tomar por culo emma ostia, que vuelvan yaaa
    eh, me ha encantadoooooooooooo
    sube pronto!!!<3

    ResponderEliminar
  7. OMG!!!!!!! *-*


    Sigue escribiendo!!!!!!!!!!


    me encanta!:)

    ResponderEliminar
  8. Este es, definitivamente, uno de los mejores capítulos de tu fic, junto con el 8 de la segunda y alguno más de la primera temporada jaja Sólo pasaba por aquí, y he dicho: "¿Por qué no dejarle un comentario tonto en el fic a mi cautivadora-de-camareros-de-Starbucks favorita?" y nada, aquí estoy jaja te quiero mucho Raquel :)

    ResponderEliminar
  9. Me encanta.. es el mejor fic que e leído, cada vez me enamora mas Danny. Tendría que dejar a Emma la verdad que no la aguanto y tendría que volver con Raquel.... Publica prontoo :)

    ResponderEliminar